Una cara sin reconocimiento
La boca sin voz
Una lengua del pasado
La piel quemada del sol
Con piernas, fuertes y desgastadas
Orejas que oyen el grito de hambre
Con manos indefensas y atadas
Ojos que lloran por el pobre
Soy la mente que anhela la educación
Pies para llevarme a prosperidad
Soy el ceño fruncido con preocupación
Pero un espíritu de tranquilidad
Hecho de una cultura auténtica
Un corazón lleno del amor
La columna vertebral de las américas
Soy latino, un alma luchador
-Jordan Pomeroy-